Mis musas, mujeres que me inspiran.

Como ya es sabido por los pocos que leen mis blogs, es muy frecuente que en mis historias, los protagonistas sean personajes femeninos.
Lo que no es tan sabido, es una costumbre que he llevado a cabo durante los últimos años. Cuando se acercaba nochevieja, confeccionaba mis propios calendarios con fotos que bajaba de internet, de actrices y chicas que me gustan, para ilustrar cada uno de los meses que vienen. Pero luego, una vez pasado el correspondiente mes, uso esa foto para practicar mis habilidades con el dibujo, y así, aunque ya he renunciado por tiempo indefinido a mi carrera de dibujante de cómics, evito que estos dones se oxiden. Así surgen estos retratos, redefiniendo a estas mujeres, y convirtiéndolas, desde mi punto de vista, en mejores personajes, más bellas, más inteligentes, más peligrosas...
Con el paso de los meses y de los años, he ido acumulando estos dibujos abocetados a lápiz, hasta que decidí hacer limpieza general en mi piso. Y al hacerlo, salvé unos cuantos de estos retratos, y los elevé al siguiente nivel. Los entinté y los coloreé con acuarelas, para no ir perdiendo mis mañas con el dibujo.
Más tarde, creí conveniente subir estas imágenes a mi cuenta de facebook, para que todos los que entren en el álbum de Mis tareas pudieran ver a estas chicas tan guapas, vistas desde mi imperfecta y subjetiva perspectiva. Sería otra manera más de promocionar mi obra, al igual que cuando escribo en este blog.

Empiezo con esta primera imagen, mi interpretación de una jovencísima Natalie Portan, que originalmente posaba así para la película de León, el profesional. Aunque también podía haber dicho Winona Ryder, Keira Knightley o Moon Bloodgood. Porque lo cierto es que este tipo de chica, de piel pálida, ojos negros y cabellos morenos, suele ser la que protagoniza mis historias. A estas actrices debo la inspiración para crear a personajes como Inés Luz de El Heraldo del Caos, Irene Custodio de El Observador, la protagonista homónima de La odisea de Tashiko, Sakura Yamamoto de La colonia infernal, y Tomoe Wing-chun de La estación de los condenados. Porque me parecen preciosas, aunque se aparten de ese estereotipo tan manido de la rubia sexy.

Aunque en realidad, no hago ascos a ninguna mujer bonita, sobre todo si también presentan habilidades para la acción, y demuestran ser muy inteligentes. Es el caso de Charlize Theron (retratada arriba), la cual me dejó impactado en Aeon Flux, y aún más interpretando Imperator Furiosa en la última película de Mad Max, en donde la encontré atractiva, a pesar de tener la cabeza rapada y estar equipada con un tosco brazo artificial (rasgos que a muchos tirarían atrás).

También hay espacio en esta colección de retratos para actrices que no se dedican al cine convencional, porque, francamente, me encantaría que salieran de este registro de vídeos para adultos para que pudieran hacer trabajos para la pantalla grande. Por este motivo he puesto aquí este retrato de Zuleidy, que es famosa en el porno nacional por su trasero, aunque personalmente, a mí me gusta más su cara, y sus larguísimos cabellos.

Y es que en mis novelas, mis personajes femeninos, además de ser fuertes e inteligentes, también son sexualmente activas, dispuestas a consumar sus relaciones afectivas, y a emparejarse con las personas que ellas quieren, simplemente, porque les apetece hacerlo. Así que para terminar este blog, os dejo este retrato de Michelle Wild, y si os fijáis en esta ilustración, y averiguáis por qué esta chica es tan peligrosa... ¡Enhorabuena! ¡Habrás salvado la vida!