EQUINOXE INFINITY
Como ya declaré en anteriores entradas, tengo una especial devoción por la música de Jean-Michel Jarre. Por esta razón, soy de los que coleccionan sus discos cada vez que se edita uno nuevo.
En esta ocasión, hablaré de EQUINOXE INFINITY, que viene a ser la continuación de EQUINOXE. Y una vez más, estas canciones me sirvieron de inspiración para escribir una nueva historia. Aunque solamente hace falta leer los títulos de las diez canciones que componen este nuevo disco, para saber de qué va este nuevo cuento.
Así es. Yo ya había escrito sobre esta profecía tecnológica en El Observador, la segunda novela que he publicado con Ediciones Atlantis. Y que conste que no hice este destripe hasta ahora, porque quería asombrar al lector con la insólita conclusión de esta entrecruzada trama de novela negra. Pero dado que no está siendo una de mis novelas más leídas, y que ya lleva años en circulación, creo que ya va siendo hora de que la gente se entere, de una vez por todas, cuál es la verdadera naturaleza del hacker que protagoniza El Observador.
Al fin y al cabo, yo mismo no había interesado por Abre los ojos o Wayward Pines hasta que me enteré de qué iban.
Así que os dejo este vídeo, la primera versión que Jarre compuso sobre THE OPENING, que pretende ilustrar ese momento inevitable que todos veremos, en el que una inteligencia artificial adquirirá conciencia de su propia existencia.
En esta ocasión, hablaré de EQUINOXE INFINITY, que viene a ser la continuación de EQUINOXE. Y una vez más, estas canciones me sirvieron de inspiración para escribir una nueva historia. Aunque solamente hace falta leer los títulos de las diez canciones que componen este nuevo disco, para saber de qué va este nuevo cuento.
- THE WATCHERS.
- FLYING TOTEMS.
- ROBOTS DON´T CRY.
- ALL THAT YOU LEAVE BEHIND.
- IF THE WIND COULD SPEAK.
- INFINITY.
- MACHINES ARE LEARNING.
- THE OPENING.
- DON´T LOOK BACK.
- EQUINOXE INFINITY.
Si ya chapurrean algo de inglés, ya adivinarían que mi nueva historia trataría de algo que los científicos e informáticos llevan años profetizando, y que Jarre quiso plasmar con estos nuevos temas musicales; la aparición de la primera forma de vida artificial, o lo que es lo mismo, la adquisición de conciencia por parte de una inteligencia artificial. Es un escenario futuro que ya habían profetizado muchos autores de ciencia ficción.
Así que empecé a fantasear con un futuro cercano, con una sociedad en donde está normaliza la interacción entre robots y humanos, y estas máquinas pensantes, al percatarse de que los humanos somos seres finitos, aprenden hasta desarrollar conciencia de sus propias existencias...
Pero entonces, me paré a pensar; ¡un momento! Yo ya había escrito sobre este tema.
Así es. Yo ya había escrito sobre esta profecía tecnológica en El Observador, la segunda novela que he publicado con Ediciones Atlantis. Y que conste que no hice este destripe hasta ahora, porque quería asombrar al lector con la insólita conclusión de esta entrecruzada trama de novela negra. Pero dado que no está siendo una de mis novelas más leídas, y que ya lleva años en circulación, creo que ya va siendo hora de que la gente se entere, de una vez por todas, cuál es la verdadera naturaleza del hacker que protagoniza El Observador.
Al fin y al cabo, yo mismo no había interesado por Abre los ojos o Wayward Pines hasta que me enteré de qué iban.
Así que os dejo este vídeo, la primera versión que Jarre compuso sobre THE OPENING, que pretende ilustrar ese momento inevitable que todos veremos, en el que una inteligencia artificial adquirirá conciencia de su propia existencia.
Porque si se ha cumplido la profecía microbiológica de que un virus puede producir una pandemia que ponga en jaque la civilización actual, entonces, ¿por qué no va a aparecer una IA capaz de filosofar?
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