El Heraldo del Caos.
El Heraldo del Caos es la primera novela que he publicado en formato de papel.
Cuando escribí este libro, lo hice porque quería contar una historia larga, protagonizada por un personaje que evoluciona a lo largo del relato, a medida que va viviendo nuevas y emocionantes aventuras.
Así creé al personaje de Telecus Moscagua, un chaval criado en una sociedad medieval, y condenado a heredar el trabajo de su familia. Y es que el pobre Telecus no llega ni a ser un humilde granjero. Está mucho más abajo en el escalafón social; se dedica a remover el estiércol de las cuadras de su pueblo.
Pero un buen día, la primavera llega a su vida cuando conoce a Inés Luz. Se enamora al instante de ella, cuando le enseña a lavarse las manos antes de ponerse a comer.
La vida de Telecus cambia para mejor a partir de este encuentro. Además de que dejó de sufrir retortijones intestinales por comer el pan con las manos manchadas de estiércol, Telecus se las arregla para ser uno de los discípulos de Inés Luz. De hecho, se convierte en su alumno más aventajado. Descubre que en la vida hay mucho más que el trabajo con el maldito estiércol. Telecus aprende a leer, a operar cuentas matemáticas básicas, a explorar el medio ambiente que rodea al pueblo; en definitiva, Telecus cultiva el placer de adquirir nuevos conocimientos.
Sin embargo, no todo es de color de rosa para Telecus. Para empezar, cuando va a declarar su amor ante Inés Luz, ella se le adelanta y le dice que ya está emparejada. Fue un descubrimiento que rompió el corazón de Telecus, pero lo dejó pasar, porque veía que Inés era feliz con su nueva pareja.
No obstante, esta pareja termina por traicionar a Inés cuando, de improviso, es acusada de brujería. Telecus inicia entonces el viaje que cambiará para siempre su vida. Se traslada a la capital, donde Inés será juzgada y condenada a morir quemada viva en la hoguera. Telecus asiste angustiado a la ejecución de su amor no correspondido.
Y es entonces, cuando la historia arranca de verdad. Cuando Inés es quemada, aparece una luz en el cielo, y de ella bajan unos monstruos que se encargan de rescatar a Inés. En medio del pánico generado por tan insólita manifestación, Telecus también trata de salvar la vida de Inés. Es un admirable acto de valor y altruismo, que hizo que Telecus también sea rescatado por esas misteriosas criaturas.
Luego, Telecus despierta a bordo de una nave espacial, y es reclutado por el padre biológico de Inés. Emprende entonces una accidentada carrera militar, que le hará participar en un conflicto interplanetario de proporciones épicas. A partir de aquí, las aventuras de Telecus Mocagua se van sucediendo, una detrás de otra. Se las tendrá que ver con piratas espaciales, ejércitos que invaden mundos primitivos, organismos cibernéticos, monstruos creados con ingeniería genética, plagas de hongos azules, enemigos equipados con robots tripulados, una aterradora armada de máquinas exterminadoras... Y a lo largo de la novela, Telecus irá aprendiendo nuevas habilidades, conocimientos y dones, que le permitirán convertirse en un guerrero legendario; el Heraldo del Caos.
En definitiva, es una novela que no deja que el lector se acomode, porque cuando parece que la trama se ha normalizado, a Telecus le sucede algo nuevo, que le obliga a luchar y tomar arriesgadas decisiones, hasta que termina por participar en una gran batalla épica espacial, en donde se juega el destino de todos los seres vivos del universo. Un relato trepidante lleno de aventura y acción, que traté de plasmar en el siguiente booktrailer:
Y si sois más de leer libros electrónicos, está disponible la primera parte de este novelón en la siguiente dirección:
https://www.amazon.es/Amor-P%C3%A9rdida-Heraldo-del-Caos-ebook/dp/B00OU7AA9K
Cuando escribí este libro, lo hice porque quería contar una historia larga, protagonizada por un personaje que evoluciona a lo largo del relato, a medida que va viviendo nuevas y emocionantes aventuras.
Así creé al personaje de Telecus Moscagua, un chaval criado en una sociedad medieval, y condenado a heredar el trabajo de su familia. Y es que el pobre Telecus no llega ni a ser un humilde granjero. Está mucho más abajo en el escalafón social; se dedica a remover el estiércol de las cuadras de su pueblo.
Pero un buen día, la primavera llega a su vida cuando conoce a Inés Luz. Se enamora al instante de ella, cuando le enseña a lavarse las manos antes de ponerse a comer.
La vida de Telecus cambia para mejor a partir de este encuentro. Además de que dejó de sufrir retortijones intestinales por comer el pan con las manos manchadas de estiércol, Telecus se las arregla para ser uno de los discípulos de Inés Luz. De hecho, se convierte en su alumno más aventajado. Descubre que en la vida hay mucho más que el trabajo con el maldito estiércol. Telecus aprende a leer, a operar cuentas matemáticas básicas, a explorar el medio ambiente que rodea al pueblo; en definitiva, Telecus cultiva el placer de adquirir nuevos conocimientos.
Sin embargo, no todo es de color de rosa para Telecus. Para empezar, cuando va a declarar su amor ante Inés Luz, ella se le adelanta y le dice que ya está emparejada. Fue un descubrimiento que rompió el corazón de Telecus, pero lo dejó pasar, porque veía que Inés era feliz con su nueva pareja.
No obstante, esta pareja termina por traicionar a Inés cuando, de improviso, es acusada de brujería. Telecus inicia entonces el viaje que cambiará para siempre su vida. Se traslada a la capital, donde Inés será juzgada y condenada a morir quemada viva en la hoguera. Telecus asiste angustiado a la ejecución de su amor no correspondido.
Y es entonces, cuando la historia arranca de verdad. Cuando Inés es quemada, aparece una luz en el cielo, y de ella bajan unos monstruos que se encargan de rescatar a Inés. En medio del pánico generado por tan insólita manifestación, Telecus también trata de salvar la vida de Inés. Es un admirable acto de valor y altruismo, que hizo que Telecus también sea rescatado por esas misteriosas criaturas.
Luego, Telecus despierta a bordo de una nave espacial, y es reclutado por el padre biológico de Inés. Emprende entonces una accidentada carrera militar, que le hará participar en un conflicto interplanetario de proporciones épicas. A partir de aquí, las aventuras de Telecus Mocagua se van sucediendo, una detrás de otra. Se las tendrá que ver con piratas espaciales, ejércitos que invaden mundos primitivos, organismos cibernéticos, monstruos creados con ingeniería genética, plagas de hongos azules, enemigos equipados con robots tripulados, una aterradora armada de máquinas exterminadoras... Y a lo largo de la novela, Telecus irá aprendiendo nuevas habilidades, conocimientos y dones, que le permitirán convertirse en un guerrero legendario; el Heraldo del Caos.
En definitiva, es una novela que no deja que el lector se acomode, porque cuando parece que la trama se ha normalizado, a Telecus le sucede algo nuevo, que le obliga a luchar y tomar arriesgadas decisiones, hasta que termina por participar en una gran batalla épica espacial, en donde se juega el destino de todos los seres vivos del universo. Un relato trepidante lleno de aventura y acción, que traté de plasmar en el siguiente booktrailer:
Así que ya saben, si les gustan las historias épicas de ciencia ficción, podéis conseguir esta novela en los siguientes enlaces:
Y si sois más de leer libros electrónicos, está disponible la primera parte de este novelón en la siguiente dirección:
https://www.amazon.es/Amor-P%C3%A9rdida-Heraldo-del-Caos-ebook/dp/B00OU7AA9K
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