Reseña "El último concierto".
En agosto del 2018, unos jubilados se fugaron de su residencia para asistir a un festival de Heavy Metal; fue una fake news que se hizo viral.
No obstante, el incombustible Xaime Fandiño tomó esta noticia falsa como inspiración para escribir su novela, El último concierto, un libro publicado por Editorial Elvira. Concebida originalmente como un proyecto audiovisual, esta historia está escrita mayormente en tiempo presente, sobre todo cuando se refiere a acontecimientos datados en el 2019, que es cuando se desarrolla la trama principal de esta novela. El autor recurre al tiempo pasado cuando narra sucesos de los años sesenta del pasado siglo, contando vivencias de la juventud de algunos de sus protagonistas, vivencias que, en gran parte, explican la fuerte personalidad de estos personajes, cuatro veteranos, campeones de la vida, que han formado un grupo de Rock en su residencia situada en Cangas do Morrazo. Se trata de la banda de Los Murciélagos, que está formada por Nito, un cantante políglota que guarda en secreto su origen portugués, Ansi, un exbanquero y erudito en temas musicales, Willy, un broncas con sentido del ritmo, y Jimmy, un ingeniero con conocimientos informáticos y afectado por una esclerosis múltiple que le tiene atado a una silla de ruedas.
La trama principal arranca con la compra de unas entradas a través de Internet para acudir al Resurecction Fest, un festival de heavy metal que se celebra en Viveiro a principios del mes de Julio, seguida por la súbita muerte de Nito, víctima de un ataque de abejas velutinas que asaltan la residencia. Tras el funeral de Nito, de su correspondiente incineración y del descubrimiento de una misteriosa fotografía en su cuarto de la residencia, los Murciélagos supervivientes deciden adelantar la salida al Resurrection para viajar a Portugal, para averiguar quién es la mujer que aparece en la mencionada fotografía y descubrir si Nito tenía parientes que quieran reclamar sus cenizas. Para realizar este viaje cuentan con la ayuda de Oti y su vieja furgoneta de pescadera.
Ahora bien, como son cuatro personas adultas y plenamente dueñas de sus capacidades cognitivas, emprenden este viaje por carretera sin haber emitido una notificación de su escapadita festiva al personal de la residencia. Por lo tanto, paralelamente a la trama de road movie, también se desarrolla una trama secundaria centrada en Mateo, el encargado de la residencia, y los amigos y familiares de los cuatro viajeros, que no tardan en alarmarse al comprobar que los cuatro no han vuelto a sus respectivos hogares. Una alarma que se calma a partir de una de las primeras publicaciones de Jimmy, una fotografía trucada en donde los cuatro escapados posan con la Estatua de la Libertad de fondo.
Así pues, mientras los cuatro viajeros van descubriendo el oculto pasado del finado Nito como refràtario portugués, a Mateo, el asunto de la escapada se le va haciendo una bola de nieve que aumenta de tamaño a medida que baja por una cuesta, empezando por la presión de sus superiores de la Xunta, seguido por el descubrimiento de un cultivo de medicina alternativa en el huerto de la residencia, o las sucesivos fotos y vídeos emitidos por Jimmy para despistar a las autoridades. De hecho, el exterior de la residencia no tarda en convertirse en una especie de estrafalario circo ferial en donde conviven vendedores de marihuana, jóvenes activistas de los derechos sociales de los mayores e, incluso, nudistas naturistas.
Y para colmo, ambas tramas se complican con la perversa intervención de uno de los parientes de los escapados, que amenaza con incapacitar con un mandato judicial a su padre, lo que convertiría esta escapadita de viejos rockeros en un secuestro por parte de los otros tres miembros del grupo...
El resultado es un rocambolesco relato en donde se mezclan los datos históricos del siglo XX, con las actuales vivencias ociosas de los cuatro excursionistas y el suspense de si llegarán al Resurrection sin ser apresados por la policía, todo ello salpicado por profusos conocimientos musicales. Es un viaje de diez días, que el autor a dividido en sendas diez partes, dando lugar a un relato que recomiendo leer una parte por día, para que el viaje sea más vívido para el lector.
Debido a la cantidad de títulos de canciones y bandas mencionadas en este libro, elegir un tema para cerrar la presente entrada me ha sido una tarea bastante ardua, siendo el principal motivo por el que tardé tanto en escribirla. Y es que el autor hace gala de sus conocimientos musicales, en donde hay temas de cantautores italianos, como Gino Paoli. Nicola di Bari, Christophe, Adamo o Sandro Giacobbe, canciones yeyé de Lone Star, Bar-Kays, Pedro Ruy-Blas, Roberto Carlos, Jean Batptista Humet, Los Bravos, Triana, Rui Veloso, Luís Cilía, Canovas, Rodrigo, Adolfo y Guzmán, o Albert Hammond, mariachis mexicanos como Los Lobos, Vicente Fernández, Pedro Infante o Desperados, clásicos internacionales como Led Zeppelin, Procol Harum, Bob Marley, Steppenwolf o Bee Gees, y grupos actuales como Arch Enemy, Uxía, GNR, Los Suaves, Wöyza, Monn Cresta, Stick to your guns o Heaven shall burn (¡Ay, cómo cansa esto!). Espero no haberme dejado fuera a nadie, ni haber mezclado churras con merinas. Incluso se mencionan otros grupos que no son popularmente conocidos, como es el caso de Los Deteriorados, una banda intergeneracional en donde participa cierto escritor...
Pero, al final, he decidido cerrar esta entrada con el tema Maneras de vivir, de Rosendo Marcado, porque se canta en el momento climácico de esta novela, El último concierto, de Xaime Fandiño y publicado por Editorial Elvira.
- Respetar la Heterogeneidad.
- Erradicar el Edadismo.
- Cultivar la Intergeneracionalidad.
- Huir del Gueto Cronológico.
- Vivir una Longevidad Audaz.
- Consolidar un Plan Vital posjubilar.
- Construir un Hábitat multi-etario, inclusivo y ecológico.
- Educar para Aprender Envejecer.
- Promover la Transferencia de Conocimiento entre generaciones.
- Permitir la plena Participación Social más allá de la cronología.
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